Tropiezas con la realidad, corres a por tu sueños.

martes, 21 de junio de 2011

Llega el sol.


Y hoy es el día, día que espero y día que temo. Mis costillas se pegan a mi pecho, mis pantalones se acercan hasta confundirse con mi piel. Hace calor, mucho calor. Es de nuevo verano, vuelve el ciclo de siempre. La naturaleza, amiga bendita que no te abandona. Maldita seas naturaleza. Quiero que me dejes sola. Por una vez te pido que bloquees el tiempo, que se congele. Déjame disfrutar de un trozo de felicidad. Verano quédate en la puerta unos minutos, deja que mi alma diga adiós y mi cuerpo se desvanezca con tranquilidad. Tengo ganas de sentir el aire que corre entre las calles y me recuerda que estás conmigo. Quiero que no vengas, o que pases fugazmente. No te quiero ver, o quiero apenas vislumbrarte. Tengo miedo de que te quedes más tiempo del apropiado.¿ Qué dirán los vecinos si el verano pasa la noche entera en mi piso de soltera? No quiero ni pensarlo. Sería inmoral, incorrecto. Y solo por eso , me recorre adrenalina por la venas. Que se rían de mí si creen que soy idiota. Que me miren con asombro si no entienden nada de lo que grito a susurros. No me importa. No te guardo rencor, verano. Amigo, amigo de tres meses cada año. Veranos de arena, veranos color amarillo. Pero hoy, verano, hoy por más que lo intente te veo de color negro. Ay! Qué asco nene! Que harta estoy de escribir las cosas que nunca te diré. Cansada de repetir el mismo discurso. Temerosa porque si me salgo del guión el director se puede enfadar. No es mi culpa que la directora y la actriz de mi vida no se pongan nunca de acuerdo. Ellas hablan , discuten, pelean. Han llegado a veces, a las manos. Se declaran la guerra por el día, y algunas noches la tregua es pronunciada por los labios de alguna de ellas. No saben vivir la una sin la otra. Pobre imbéciles. Y yo, yo simplemente sigo sus órdenes, la que grita más fuerte. A esa le hago caso, la otra queda hecha polvo mientras busca un buen contraataque. Verano, amigo, no intento que me entiendas. Es mucho pedir. Solo quiero que me escuches, por favor. Sé sensible conmigo, tan solo mírame y tus ojos se encontrarán con los ojos de estas tres idiotas que luchan por sobrevivir en un mundo de locos, mundo al que se le hecha encima un largo verano caluroso.

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