domingo, 6 de marzo de 2011
Tengo ganas.
Tengo ganas de ser una hormiguita., una hormiga chiquitita., diminuta. Una que necesite muy poco para sobrevivir. Ser algo pequeño., invisible para unos ajetreados ojos de ciudad. Tengo ganas de ocupar muy poco espacio ., que un viento fuerte me arranque del suelo y me lleve al otro lado del mar. Una hormiga., pequeñas patitas que esquivan peligros constantes . Una hormiga valiente que no teme a esos gigantes que van y vienen sin parar un segundo a escrutar seres inferiores. Una hormiga valiente que desaparece ante unos grandes ojos negros. LA HORMIGA HA VUELTO AL HORMIGUERO A CONVIVIR CON SERES COMO ELLA. Y LOS OJOS MIRAN AL CIELO ALGO MÁS GRANDE QUE ELLOS.
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